Toda historia tiene un principio...


... y esta aún no ha llegado a su final.

Pero para entender el Ahora, debes conocer el Ayer.

En esta crónica plagada de claves, de secretos, de metáforas, simbolismos y sueños, sólo quienes comiencen el viaje desde el mismo punto en que se inició lograrán comprenderlo.

Toda historia tiene un Principio. Comiénzalo.




jueves, 12 de noviembre de 2009

Y en la oscura habitación...



Silencio, sólo silencio, siempre silencio. En la penumbra azul, tímidos rayos de Luna intentan atravesar la oscuridad en diminutas ráfagas.


Crujidos, susurro de sábanas, rozar de una piel, suspiros. Esta noche el sueño no desea llevársela.

Finalmente, se desliza la primera lágrima. Es un llanto ahogado, apenas audible, sollozos levemente interrumpidos por bocanadas de aire. Un llanto primigenio, puro, una niña pequeña que llora.

Dos brazos desesperados se alzan hacia lo alto, manos ansiosas arañando el aire, intentando encontrar algo en lo que aferrarse. Sólo encuentran vacío.

En murmullos lastimeros, no para de repetir "Yo creo... yo creo...", invocando a seres que nunca responden a sus llamados. Pero su alma cree en ellos, y es por eso que, cerrando fuertemente los ojos, extiende la punta de sus dedos esperando rozar un rostro, una piel, un aliento que demuestre... que no está sola. Que no se equivocó al creer que hay más mundo que el que podemos ver.

La niña llora acompasadamente, a escondidas, el dolor y la soledad.

Las lágrimas arrastran la negrura, sus sollozos se tranquilizan, sus párpados se cierran. Purificada, serena, en calma, se duerme.

Desea soñar con su Rey de los Goblins.

Desea no tener que despertar a la realidad.

Desea una voz que nunca oirá.

Silencio, sólo silencio.

Una noche más.



(... necesito oír tu voz... baila, magia, baila... y llévame contigo... nunca te tendré. ¿Verdad?)

1 comentario:

Temperamental dijo...

Hermosamente inspirado y soberbiamente escrito... no soy experta pero puedo decir que me ha llegado hasta el fondo del alma....

Gracias por tan hermoso regalo en esta noche de soledad orgánica y de compañía cibernética.