Toda historia tiene un principio...


... y esta aún no ha llegado a su final.

Pero para entender el Ahora, debes conocer el Ayer.

En esta crónica plagada de claves, de secretos, de metáforas, simbolismos y sueños, sólo quienes comiencen el viaje desde el mismo punto en que se inició lograrán comprenderlo.

Toda historia tiene un Principio. Comiénzalo.




miércoles, 5 de noviembre de 2008

Amigos



La vida trae acontecimientos. Unas veces son imprevisibles, otras predecibles, pero una cosa jamás falla: la rueda gira y gira, y siempre trae consigo nuevas vivencias en cada vuelta.

La lobo lo sabe. Y también sabe que mucho tiene que agradecer a que siempre que hay un giro tiene a sus amigos con ella.

Los quiere mucho. Quizás por eso precisamente entre ella y ellos tienen tanta capacidad de hacerse daño mututamente sin pretenderlo. Pero el bálsamo de la confianza y el respeto a la libertad de cada uno de ellos puede cicatrizar esas heridas.

Los recorre con la mirada. El dragón grulla y el pájaro de fuego revolotean sobre su cabeza, a veces lejos, a veces cerca, siempre ahi. Los lobos de la manada de Brigantium aullan bajo ellos, aguardando una próxima reunión de clan. Cuantas veces le han ayudado a levantarse.

El genial Comando de los Bichos, con su líder a la cabeza. Compartir risas con ellos e intercambiar confidencias, ya sea con el pájaro oscuro o con su pareja, es una de las cosas que más animan.

Los lobos de Cilenia, entre ellos el mago bardo, el lobo marino, el ilusionista y muchas otras crituras sin definir todavía, que le han regalado bellas tardes y noches de agradable charla, divertido rol y montones de diversión.

El troll y el dragón demonio de Pontus Veteris, junto con el veterano, el pequeño demonio mayor, las hermanas del dragón y muchos otros. Verles es una garantía segura de que lo pasará como nunca. Simbolizan risas, rol y desenfreno. Con ellos jamás ha tenido una mala palabra.

La pequeña ánade testaruda y su mejor amiga hablan más cerca de ella, pues su vivienda se sitúa en la misma zona, así como la criatura esmeralda. Y no son pocas las horas que pasa con ellas, hablando, riendo y exhalando humo mezclado con recuerdos.

La princesa canina de ojos pálidos, con su sonrisa y su amabilidad.

El gran lobo que desde hace años la escucha y consuela, siempre presente con una sonrisa amable, con su eterna calma contagiosa y con sus patas dispuestas a cobijar su cuerpecillo (pues junto a él la lobo, de normal grande, se siente pequeñísima) lloroso y helado por el frío en un abrazo fuerte.

La serpiente, protectora hasta el extremo, consejera, a veces administra mordeduras de realidad que compensa con una comprensión sin límites y un gran cariño hacia su, podríamos así decirlo, hijita y hermanita.

El felino, do quiera que esté, no importa lo poco que lo vea, porque se ganó un profundo hueco en su corazón.

La que fue tantas criaturas que a día de hoy ignoro con cual se identificará más, aunque parece querer mucho a los erizos. Un corazon de oro y una amistad que los años nunca han conseguido que olvide, aunque ahora esté lejos, muy lejos, en las Tierras del Norte Germano.

Y el águila. Pese a todo. Y sin saber muy bien por qué. Aunque quizás debería incluirlo en una categoría distinta.

Son tantos que quizás la lobo no terminaría de nombrarlo así tuviera una vida entera para dedicarla a esa tarea. A sus ojos forman un cuadro heterogéneo de colores, voces, aromas, rostros y tactos.

Un cuadro que le agrada.

Dedicado a todos vosotros, porque a veces me hacéis llorar lágrimas amargas, me desesperáis o me enfurecéis, me traéis de cabeza o me chincháis sin fin, pero qué demonios.

Todo eso merece la pena sólo porque un simple momento de risas con vosotros me permite cruzar una eternidad de dicha y ánimo.

Porque os quiero, maldita sea. Sois la familia que he elegido.

Por vosotros.


4 comentarios:

Breogán dijo...

Las nubes del horizonte se desbanecen más rapido con la brisa del mar...
Como ves, siempre tendrás una brisa en forma de amistad, que despejará tus cielos nublados.

Sigue animada, reina Lobo.

Unha aperta Grande

Fenix dijo...

La proxima vez que nos veamos te voy a zurrar a espadazos. Que no se puede ser tan sentimental! que si no nos pones sentimentales a los demas! :P

Saludos lobiña!

Kimuko dijo...

No, lobita, no: Gracias a ti :**

Marina dijo...

Ciertamente, los animales son normalmente mucho más civilizados que las personas.
"Los halcones y los lobos también pueden estar juntos".

De momento, tu lechucita del bosque, pero sabes que nunca he dejado de lado la idea de manta raya (las águilas del océano). Eso si, siempre animales con alas.