Toda historia tiene un principio...


... y esta aún no ha llegado a su final.

Pero para entender el Ahora, debes conocer el Ayer.

En esta crónica plagada de claves, de secretos, de metáforas, simbolismos y sueños, sólo quienes comiencen el viaje desde el mismo punto en que se inició lograrán comprenderlo.

Toda historia tiene un Principio. Comiénzalo.




domingo, 12 de octubre de 2008

Amar y ser amado



Hoy, me he sentado a pensar sobre mí, y mi actitud en los últimos días. Llevo un tiempo envuelta en una laxitud extraña, en una especie de velo de tristeza resignada y en un frenesí de descontrol.

Yo achacaba la culpa a mis hormonas. Estaba convencida de que tenían la culpa, en ello me escudaba, y seguía sonriendo como siempre. Pero las brumas nunca duran demasiado, pues basta que el Sol las disipe, y así, las mías han desaparecido con la luz de la reflexión.

No son mis hormonas, como yo creía, aunque parte de la culpa la tienen. No es que extrañe el deseo.

Es amar, y ser amada. Eso es lo que extraño.

No quiero dar pie a equívocos con mis palabras. No pongo en duda ni por un segundo que hay personas que me aman. Sé que las hay. Igual que hay personas a las que yo amo.

Pero no confundamos el amar con el querer. Y aquí se da la casualidad de que soy amada, pero no amo, y amo sin ser amada.

Es algo difícil de explicar, y quizás aún más difícil de entender, pero a veces, ser amada no es suficiente. Amar no es suficiente. Necesitas ambas, y ése es mi problema.

Deseo amar a alguien que me ame de la misma manera. Deseo ser amada por alguien a quien yo ame igualmente. Hecho en falta aquellos paseos con una presencia cálida y cercana a mi lado, a la que igualmente yo le proporcionaba amor y confianza. Esas tardes que pasaban volando y al mismo tiempo eran interminables, esas miradas que decían más que mil palabras. Esos detalles sencillos y cotidianos, esos "Te quiero" sin venir a cuento, simplemente por necesidad de decírselo al otro, esos momentos en los que un abrazo bastaba para ahuyentar cualquier duda, cualquier dolor.

Desde su marcha, jamás volví a tener eso. Tuve y tengo amistad, deseo y comprensión, pero no esas pequeñas tonterías propias de dos enamorados ebrios de felicidad y con mundo aparte sólo para los dos.

Únicamente dos personas pudieron llegar hasta el lugar más recóndito de mi alma. Y ahora, ninguna de ella está a mi lado y nadie ha vuelto a hoyar los senderos que ellos pisaron.

¿Por qué? ¿Por qué no pudisteis amarme? ¿Por qué no pudisteis seguir amándome?

Porque, pese a todo, yo os amé y os amo.

Y tarde o temprano, volveré a amar y a ser amada. Eso espero.

Dejemos actuar al tiempo.



5 comentarios:

Kimuko dijo...

Eso cielo, tiempo al tiempo y ánimo :*

Astharthé dijo...

El tiempo todo lo cura...pese a todo, el saber que estas falta de ese sentimiento, como tu dices, del amar y ser amado, no solo del ser amado por un lado y amar por otro, duele constantemente e incluso se llega a hacer una espina en el pecho por su constante presencia...

Pero pese a todo, solo puedo decirte que al tiempo...y que a veces es mejor no intentar encontrar la solución, sino simplemente, esperarla...

Un beso.

Anónimo dijo...

En cien años todos calvos... aprovecha el tiempo en vez de dejarlo pasar.

Anónimo dijo...

Te echamos de menos en Rioko Owari.

Anónimo dijo...

Los antiguos amores siempre estaran ahi, en la memoria de cada uno; pero siempre hay que mantener esa puerta abierta: la esperanza, no decaigas, vuelvete a levantar y alza bien alta la cabeza.

muchos animos

De parte de tu nazgul favorito.
Azrael