Es una batalla, siempre será una batalla, pero es la única en la que o los dos pierden o los dos ganan...
A quien le importa, sólo a los contendientes les incumbe esta lucha... velando cada noche las armas que son el amor y el deseo.
¿Serás tú el guardián de mi piel?
(Sin más motivo que el que me guste esta melodía... toda persona será y tendrá un guardián...)